La Filtración
El motor de un vehículo está equipado con un sistema de lubricación de aceite. De la misma manera que usa aire externo, consuma combustible. Un motor puede funcionar por períodos prolongados sólo si usa fluidos limpios. La partículas abrasivas tanto de origen interno como externo, contenidas en los fluidos en movimiento pueden causar desgaste y daños graves al motor. Por tanto es necesario reducir la dimensión y la cantidad de dichas partículas al mínimo. Esta es la función esencial de los filtros.
Los vehículos pueden estar equipados también con filtros de cabina, independientes de cualquier sistema de acondicionamiento de aire.
La filtración es un proceso que consiste en la separación del componente de la fase continua (líquido o gaseoso) de los componentes de la fase dispersa (sólidos o líquidos). Esta separación resulta de la presión ejercida sobre la suspensión cuando ésta última se presiona contra un cuerpo poroso.
Las prestaciones del filtro dependen de la caída de presión, de la eficiencia y de la vida útil, por tanto:
- LA CAÍDA DE PRESIÓN es la diferencia de presión instantánea entre el fluido que entra y que sale del filtro. Debería ser lo más baja posible.
- LA EFICIENCIA de un filtro depende de la finura de la filtración. Un filtro eficaz evita el desgaste prematuro del motor.
- LA VIDA ÚTIL depende de la cantidad de contaminación que se puede bloquear antes que el filtro deje de funcionar.
Todos nuestros filtros cumplen con estos requisitos y se deben cambiar siguiendo las recomendaciones del Fabricante o por lo menos una vez al año.